El western ese género inconfundible que ha sido capaz de capturar la imaginación de generaciones, tuvo en Lee Van Cleef uno de sus más inolvidables protagonistas. A pesar de no haber alcanzado en vida la fama de otros íconos de Hollywood, su carrera y legado en el cine, especialmente en el spaghetti western, lo han convertido en una leyenda inmortal. Nacido en Somerville, Nueva Jersey, el 9 de enero de 1925, Van Cleef comenzó su carrera como un actor de personajes, a menudo interpretando villanos en papeles secundarios. Sin embargo, con el tiempo y la fuerza de su imponente presencia en pantalla y gracias a la llamada de Sergio Leone, se consolidó como una de las figuras más reconocibles y queridas del western.. A lo largo de su carrera, su intensa mirada, su apariencia ruda y su habilidad para transmitir una mezcla única de peligro y carisma lo llevaron a protagonizar una serie de películas que lo convirtieron en un ícono. Entre ellas destacan estos 7 clásicos del spaghetti western
1. El bueno, el feo y el malo (Il buono, il brutto, il cattivo) (1966), de Sergio Leone
Sin lugar a dudas, "El bueno, el feo y el malo" es la cúspide del cine spaghetti western y una de las películas más icónicas de todos los tiempos. En esta obra maestra de Sergio Leone, Lee Van Cleef interpreta al despiadado y calculador Angel Eyes, el "malo" de la historia. La película cuenta la historia de tres personajes que compiten entre sí para encontrar un tesoro oculto en medio de la Guerra Civil estadounidense. Mientras Clint Eastwood encarna al enigmático "bueno" y Eli Wallach al astuto "feo", Van Cleef brilla como el villano implacable cuya determinación y brutalidad lo convierten en una amenaza constante.
La actuación de Van Cleef en "El bueno, el feo y el malo" es un ejemplo perfecto de su habilidad para interpretar personajes sombríos con una mezcla de carisma y frialdad. Angel Eyes es el epítome del villano en el cine western: un hombre que sigue un código propio, que no muestra compasión y que parece siempre estar un paso adelante de sus rivales. Su presencia en la pantalla es magnética, con una mirada penetrante que comunica más que muchas palabras.
Uno de los aspectos más destacados de la película es el legendario enfrentamiento final en el cementerio, donde los tres protagonistas se enfrentan en un duelo tenso y lleno de suspenso. La habilidad de Van Cleef para mantener una calma peligrosa en medio de la tensión es una de las razones por las que este clímax es tan efectivo y memorable. La película, acompañada por la inolvidable banda sonora de Ennio Morricone, es una obra maestra del cine que eleva al género del western a nuevas alturas, y Lee Van Cleef, en su papel de Angel Eyes, contribuye de manera significativa a su grandeza.
2. La muerte tenía un precio (Per qualche dollaro in più) (1965), de Sergio Leone
Un año antes de "El bueno, el feo y el malo", Lee Van Cleef protagonizó "La muerte tenía un precio", otra de las joyas del spaghetti western dirigida por Sergio Leone. En esta película, Van Cleef interpreta al Coronel Douglas Mortimer, un cazador de recompensas motivado por la venganza, quien une fuerzas con el personaje de Clint Eastwood, conocido como "Manco", para atrapar al peligroso forajido El Indio, interpretado por Gian Maria Volonté.
La interpretación de Van Cleef como el Coronel Mortimer es fascinante, ya que su personaje combina una determinación fría y calculadora con una humanidad que lo hace increíblemente complejo. A lo largo de la película, se revela que Mortimer no está cazando a El Indio solo por dinero, sino también para vengar una tragedia personal, lo que añade una capa de profundidad emocional a su personaje. Van Cleef muestra su habilidad para interpretar a un hombre que, a pesar de su dureza, tiene una vulnerabilidad subyacente que lo impulsa.
El duelo final entre Mortimer y El Indio es uno de los momentos más memorables del cine western, y la actuación de Van Cleef en esta escena es absolutamente impresionante. Con una mirada llena de determinación y un sentido de justicia personal, Mortimer finalmente se enfrenta a su némesis en un enfrentamiento épico. La película es un testimonio del talento de Van Cleef para interpretar personajes complejos y de su capacidad para robarse la pantalla incluso cuando comparte protagonismo con una estrella como Clint Eastwood.
3. El día de la ira (1967), de Tonino Valerii
"El día de la ira" es otro de los grandes éxitos de Lee Van Cleef en el spaghetti western. Dirigida por Tonino Valerii, la película cuenta la historia de Scott Mary, un joven humillado y maltratado por los habitantes de un pequeño pueblo, quien es tomado bajo la tutela de Frank Talby, un pistolero experimentado interpretado por Van Cleef. A medida que Talby enseña a Scott a defenderse y a sobrevivir en un mundo hostil, los dos personajes desarrollan una relación compleja que desafía las expectativas del western tradicional.
La interpretación de Van Cleef como Frank Talby es uno de los puntos más altos de la película. Talby es un personaje duro y pragmático, pero también tiene un código de honor que lo distingue de otros forajidos del género. Van Cleef logra equilibrar la dureza de Talby con una sensación de mentoría y paternalismo hacia Scott, lo que añade una capa emocional a la historia.
Lo que hace que "El día de la ira" sea tan especial es la dinámica entre Talby y Scott. A través de su relación, la película explora temas como el poder, la lealtad y la corrupción moral. La actuación de Van Cleef es fundamental para darle peso a estos temas, ya que su personaje navega por un mundo de ambigüedad moral con una mezcla de sabiduría y cinismo. Además, la película cuenta con una banda sonora memorable de Riz Ortolani que refuerza la atmósfera tensa y dramática de la historia.
4. Oro sangriento (Sabata viene a matar) (1970), de Frank Kramer
En "Oro sangriento", también conocida como "Sabata", Lee Van Cleef asume el papel del enigmático pistolero Sabata, quien llega a un pequeño pueblo dominado por la corrupción para enfrentarse a una banda de criminales que planea robar un tesoro. A diferencia de sus anteriores papeles de villano o personajes moralmente ambiguos, Sabata es un héroe en el sentido más tradicional del western, y Van Cleef aporta a este personaje una mezcla de carisma y astucia que lo hace inolvidable.
"Sabata" es una película que se distingue por su tono más ligero y su enfoque en la acción estilizada. El personaje de Sabata es un maestro del ingenio, utilizando una variedad de artilugios y trucos para derrotar a sus enemigos, lo que le da a la película un aire casi de cómic. La actuación de Van Cleef es perfecta para este tipo de personaje, ya que combina su habitual dureza con un toque de humor y diversión.
Lo que realmente destaca en "Sabata" es la capacidad de Van Cleef para adaptarse a un estilo de western más dinámico y entretenido sin perder su esencia como actor. A lo largo de la película, Sabata se enfrenta a una serie de desafíos y enemigos con una confianza inquebrantable, lo que hace que cada escena de acción sea emocionante y satisfactoria. El éxito de la película llevó a la creación de una franquicia, aunque Van Cleef solo regresó para la tercera entrega.
5. El halcón y la presa (La resa dei conti) (1967), de Sergio Sollima
En "El halcón y la presa", Lee Van Cleef interpreta a Jonathan Corbett, un cazador de recompensas contratado para perseguir a Cuchillo, un campesino mexicano acusado de violación y asesinato, interpretado por Tomas Milian. Sin embargo, a medida que Corbett se adentra en la persecución, comienza a cuestionar la justicia de su misión y la verdadera culpabilidad de Cuchillo.
La película, dirigida por Sergio Sollima, es un spaghetti western con una fuerte carga política y social, y la actuación de Van Cleef como Corbett es fundamental para transmitir estos temas. Corbett es un hombre de principios, pero su viaje a lo largo de la película lo obliga a enfrentarse a las contradicciones de su propio código moral. Van Cleef interpreta a Corbett con una intensidad que refleja las luchas internas de su personaje, añadiendo una profundidad emocional que eleva la película por encima del típico western de acción.
El duelo final entre Corbett y Cuchillo es una de las escenas más impactantes de la película, y la actuación de Van Cleef en esta secuencia es excepcional. Su personaje ha evolucionado a lo largo de la historia, y Van Cleef transmite con sutileza el conflicto interno de Corbett mientras se enfrenta a la posibilidad de haber estado persiguiendo a un hombre inocente. "El halcón y la presa" es una de las películas más maduras y reflexivas del spaghetti western, y Lee Van Cleef demuestra una vez más por qué es uno de los mejores actores del género.
6. Gran duelo al amanecer (1973), de Giancarlo Santi
En "Gran duelo al amanecer", Van Cleef interpreta a Clayton, un sheriff retirado que decide ayudar a un joven fugitivo acusado falsamente de asesinato. La película, dirigida por Giancarlo Santi, se destaca por su estilo visual y su enfoque en la construcción de tensión, especialmente en las escenas de duelo, donde Van Cleef brilla como un pistolero experimentado que siempre está un paso adelante de sus enemigos.
Van Cleef aporta a Clayton una mezcla de sabiduría y dureza, creando un personaje que, aunque cansado del mundo, todavía tiene una fuerte ética y un sentido de justicia. Su relación con el joven fugitivo añade un elemento emocional a la película, ya que Clayton actúa como una figura protectora y mentor. A lo largo de la película, Van Cleef demuestra una vez más su habilidad para interpretar personajes que combinan el peligro con la nobleza.
El enfrentamiento final en "Gran duelo al amanecer" es una de las mejores secuencias de duelo en la carrera de Van Cleef, llena de tensión y estilo visual. La película también cuenta con una banda sonora destacada de Luis Bacalov, que refuerza la atmósfera épica de la historia. En general, "Gran duelo al amanecer" es un excelente ejemplo de cómo Van Cleef podía elevar cualquier película con su presencia magnética y su actuación matizada.
7. De hombre a hombre (Death Rides a Horse) (1967), de Giulio Petroni
"De hombre a hombre" es otro clásico del spaghetti western en el que Lee Van Cleef interpreta a Ryan, un hombre que busca venganza contra la banda de criminales que destruyó su vida. En su búsqueda, se cruza con Bill, un joven que también está en busca de venganza por la muerte de su familia. A lo largo de la película, Ryan actúa como mentor de Bill, aunque su relación está marcada por la desconfianza y las tensiones inherentes a sus objetivos compartidos.
Van Cleef interpreta a Ryan con su característico aire de peligro y autoridad, pero también añade una vulnerabilidad que hace que su búsqueda de venganza sea más que un simple deseo de justicia. A medida que la relación entre Ryan y Bill se desarrolla, Van Cleef muestra una habilidad notable para transmitir emociones complejas con sutileza, haciendo que el viaje de su personaje sea tanto emocional como físico.
El clímax de "De hombre a hombre" es uno de los más emocionantes del género, con Van Cleef enfrentándose a sus enemigos en un tiroteo épico. La película, dirigida por Giulio Petroni, cuenta con una trama llena de giros y un desarrollo de personajes que eleva la historia por encima del típico western de venganza. Van Cleef, con su interpretación carismática y su capacidad para transmitir tanto peligro como compasión, es una de las razones principales por las que "De hombre a hombre" es considerada una de las mejores películas del género.